miércoles, 11 de noviembre de 2020

ABRAZOS RETRASADOS

Cada día, vuelve la noche extensa, y el virus en el aire y en la oscuridad casi se puede ver.

Mi mirada lo sigue, esquivando su invasión en mi, pero si que veo como invade otros cuerpos.

Viaja entre el vapor de la humedad que se desplaza vigilante, y no le hace falta esquivar nada, penetrará donde quiera.

Arrojan palabras fuera de sus bocas, pero nadie las entiende en la velocidad caótica.

Ráfagas de tiempo negro van reduciendo a lo más insignificante, veo diluirse la soledad tras mi ventana.

Por el mundo abierto de nuevo a bocas destapadas, y abrazos retrasados.


Amparo Bárcenas Pérez.

11 de noviembre 2020